Deustche Welle. Según el servicio de inteligencia surcoreano, Pyongyang ha «reforzado» las defensas en su costa oriental y «reajustado» las posiciones de sus aviones militares, tras el sobrevuelo de bombarderos de Estados Unidos. (26.09.2017)

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China anunció este jueves (28.09.2017) la clausura de las empresas norcoreanas con presencia en el país y de aquellas que cuenten con capital mixto, chino y norcoreano, para cumplir con la última tanda de sanciones impuestas por el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

La medida entrará en vigor en 120 días y se produce en medio de la escalada de tensión que se vive en la península coreana. El Ministerio de Comercio informó la decisión, a través de un comunicado en su página web en el que precisó que las empresas y proyectos de infraestructuras sin fines de lucro quedan exentas de la nueva medida.

Las autoridades chinas justificaron esta decisión de acuerdo a la resolución Nº 2375 adoptada por unanimidad por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas el pasado 12 de septiembre.

Las sanciones de la ONU responden a los lanzamientos de misiles y pruebas nucleares con los que el Gobierno comunista de Pyongyang ha desafiado las resoluciones de la ONU y a la comunidad internacional.

En el marco de la resolución más reciente, China ya había anunciado hace una semana la restricción del suministro de petróleo al país vecino, así como la prohibición general de las importaciones de textiles norcoreanos, con el objetivo de presionar al régimen de Kim Jong-un.

La República Popular de China es el principal socio comercial del régimen norcoreano y también ha sido su principal aliado político. Sin embargo, en los últimos meses Pekín ha aceptado la aprobación de duras sanciones contra Pyongyang que ha impuesto el Consejo de Seguridad.

China sigue abogando por la necesidad de proseguir el diálogo para rebajar las tensiones en la región e insiste en que el uso de la fuerza militar no debe ser una opción.